¿Está su software de gestión del ciclo de vida de las aplicaciones (ALM) creando un punto ciego?
Su software ALM probablemente gestiona bien el código y los sprints, pero el software de los productos inteligentes actuales no opera de forma aislada. Las herramientas ALM y PLM desconectadas crean puntos ciegos críticos, lo que provoca fallos tardíos, riesgos de auditoría y pérdida de potencial.
- Versiones del producto mal alineadas: Los ingenieros mecánicos trabajan a partir de una definición de producto que consta de varias revisiones tras la última actualización de software, lo que provoca un caos de integración y trabajo duplicado.
- Gestión de cambios fragmentada: Se distribuye un parche de software, pero su impacto no se detecta hasta la integración de sistemas, lo que obliga a realizar más trabajo y retrasa los plazos.
- Trazabilidad deficiente: Su equipo pasa semanas compilando manualmente informes para auditorías y tiene dificultades para demostrar cómo un requisito de software se vincula con el componente físico que controla, poniendo en riesgo las certificaciones.